Málaga provincia se distingue por su notable altitud en comparación con otras regiones de España, gracias a la presencia de prominentes cadenas montañosas en su territorio. Estas montañas ofrecen una variedad de rutas homologadas que facilitan el ascenso a sus principales cumbres. Sin embargo, más allá de estas elevaciones, Málaga y Marbella ofrecen una amplia gama de opciones de distintos niveles para la práctica del senderismo, el ciclismo, la equitación o el excursionismo. En este día nos complace presentar algunas de las rutas y leyendas de montaña de Málaga y Marbella.

Rutas de montaña en Málaga: Montes de Málaga

Málaga es conocida por su abundancia de sistemas montañosos, destacando entre ellos los Montes de Málaga, situados a tan solo cinco kilómetros al norte de la ciudad. Estos montes se caracterizan por un relieve accidentado, lo que hace que algunos de sus pasos sean prácticamente intransitables. Pero esto no tiene que dar la impresión de que es inaccesible. Todo lo contrario, cuenta con numerosas rutas de las que vamos a destacar dos de ellas.

Mirador del Cochino

A una altura de 750 metros, este mirador tiene cierta cercanía a la urbe. Esto lo convierte en el lugar perfecto para los amantes de las vistas y para los que quieran incluir el mar en sus fotografías. En concreto podrán ver ampliamente la Bahía de Málaga. Su nombre proviene de una singular escultura de jabalí realizada por el escultor Francisco Martín. La llevó a cabo recogiendo restos de chatarra del Parque Natural Montes de Málaga.

Es una ruta de dificultad moderada, pero con algunas pendientes duras. Se tarda unas tres horas y media en completarla, y se puede hacer bien a pie, bien con bicicleta de montaña. Si suben hasta aquí, encontraran la siguiente flora: pino carrasco, encinas, alcornoques, madreselvas, hinojos y quejigos. En cuanto a la fauna, más difícil de ver, en la zona hay jabalíes, camaleones, zorros, ardillas rojas, cabras montesas, murciélagos enanos, comadrejas y aves rapaces.

Sendero de Pocopan

Os proponemos una ruta apta para hacer en familia y con niños. Es de dificultad moderada y se tarda unas 2 horas y media en recorrerla. Es un sendero que discurre en medio de un pinar y que tiene una gran recompensa. Termina en una casita de piedra, casi de cuento de hadas, con unas vistas preciosas. En realidad, esta pequeña construcción fue antaño una caseta de vigilancia contra incendios.

Su nombre, “poco-pan” cuenta una leyenda que viene de uno de sus primeros moradores. Este solía decir que en sus tierras había “mucho vino y poco pan” porque, en esa época, no se cultivaba trigo en los terrenos, sino que el monte se dedicaba al cultivo de la vid.

Es importante saber que, durante el siglo XIX, se estableció en Málaga la libertad de cultivo. El de vid se extendió exponencialmente y creó toda una industria del vino en la ciudad. Desgraciadamente, en 1877, una plaga conocida como 'Filoxera' atacó las plantas de manera irremediable. La tradición del vino y la pasa casi se extinguió, pero ha renacido en algunos pueblos de la provincia. No dejen de probar el vino dulce de Málaga u otras variedades. Para saber más sobre los vinos de denominación de origen de Málaga pueden seguir leyendo aquí.

Rutas de montaña en Marbella: Sierra Blanca

Sierra Blanca en Marbella es un conjunto montañoso que está compuesto por rocas calizas blanquecinas que le dan su color y su nombre. Dentro de su cordillera encontramos otros picos importantes como El Lastonar, con 1.275 metros y El Juanar, con 1.178 metros. Resulta encantador recorrer sus senderos, pero es importante planear las rutas para conocer bien los distintos grados de dificultad. Como dicen los montañeros de la zona “hay que tener respeto a la montaña”.

Subida a Juanar

La subida a Juanar es muy popular por sus vistas y porque la montaña es conocida por tener una cruz imponente en su cumbre. Dicha cruz tiene su leyenda. Cuentan los más ancianos de Marbella que, en el siglo XVIII, unos marineros que estaban pescando sufrieron un naufragio por un temporal horroroso. Desesperados porque no se orientaban, e iban ahogarse, prometieron poner una cruz allí donde hicieran tierra. Llegó la tripulación a salvo a las playas de Marbella y cumplieron su promesa. Subieron hasta el pico de Juanar con una cruz de madera movidos por la fé y el agradecimiento.

A ella comenzaron a hacer peregrinaciones y romerías las gentes de Marbella. Pasaron los años y la cruz comenzó a pudrirse. A principios de 1900 se sustituyó por una de hierro. Esta sufrió también daños durante la Guerra Civil Española de 1936. Años después, a lomos de unos mulos, los lugareños volvieron a subir la cruz hasta la cima.

Es muy interesante conocer que el hierro de la cruz está sacado de los raíles del ferrocarril de la Mina del Peñoncillo. Esta explotación minera llevaba la magnetita extraída de las montañas de Marbella hasta la playa, y de ahí hasta el mismo mar para ser transportada en barco. Si se fijan, en la Playa del Cable de Marbella quedan los restos del último poste que llegaba a los barcos.

Para hacer esta ruta y conseguir alcanzar la cumbre hay que estar en forma porque el primer tramo es sencillo, si se parte del Refugio de Juanar, pero la dificultad va en aumento. Se tarda mínimo hora y media en subir y similar en bajar. Muy importante llevar, además de agua, crema solar y distintas capas de ropa porque puede variar mucho la temperatura en el ascenso.

Subida a la Concha

Todo el mundo que conoce Marbella tiene en su mente a la preciosa montaña que protege la ciudad y que contribuye al microclima de la zona. Es todo un símbolo de su paisaje. Hablamos del pico de La Concha, con 1.215 metros de altitud. Su nombre, muy mediterráneo, viene dado porque la montaña vista desde el oeste se asemeja a un estriado molusco, a una concha hacia abajo, concretamente a una lapa.

Subir hasta La Concha supone una ruta de dificultad alta. Aunque para la los senderistas que lleven muchos años practicando sería más bien media-alta. Se tardan mínimo entre dos y tres horas en la subida, y lo mismo en la bajada (desde el Refugio de Juanar). Es todo un privilegio llegar a la cumbre y ver toda una panorámica de la preciosa Marbella y de sus pueblos vecinos. Después de haber subido una vez, ya no se olvida. Quien lo ha hecho se sonríe hacia sus adentros cuando ve el pico de La Concha desde la ciudad.

Cuando llegue se encontrará una grata sorpresa. Hay un banco solidario para contemplar las vistas. Los bomberos de Marbella lo subieron para dar visibilidad a la asociación DEBRA que se dedica a ayudar a personas con “Piel de Mariposa”. Esta es una enfermedad rara y difícil de llevar y que, ciertamente, necesita apoyos.

Uno de los primeros en sumarse a esta bonita causa fue el exfutbolista Ruud Van Nistelrooy. Subió a La Concha y difundió en sus redes sociales las fotos de la hazaña. Al ser una persona muy mediática, dio un gran espaldarazo a la asociación consiguiendo miles de interacciones en Facebook e Instagram. Esperamos que se animen a disfrutar de la naturaleza tan extraordinaria que ofrece la Costa del Sol. Hemos querido contagiarles un poco de pasión por las rutas y leyendas de montaña que Málaga y Marbella ofrecen.

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